Toxina Botulínica (Botox, Dysport o xeomin)

Tratamiento con toxina botulínica que reduce las arrugas de expresión y previene la formación de nuevas líneas faciales.

Tratamiento con toxina botulínica realizado por la Dra. Marta Leguizamón

¿Qué es la Toxina Botulínica?

La toxina botulínica tipo A es un tratamiento estético no invasivo que se ha convertido en uno de los procedimientos más populares en medicina estética. Actúa bloqueando temporalmente la conexión entre los nervios y los músculos, reduciendo la contracción muscular responsable de las arrugas de expresión. Este tratamiento no solo corrige las líneas ya existentes, sino que también previene la formación de nuevas arrugas.

Áreas de Aplicación

La toxina botulínica se utiliza principalmente para tratar arrugas dinámicas (causadas por la contracción muscular) en las siguientes zonas:

  • Líneas horizontales de la frente
  • Arrugas del entrecejo (líneas de expresión o "líneas del ceño")
  • Patas de gallo (arrugas en el contorno externo de los ojos)
  • Arrugas de la nariz ("bunny lines")
  • Código de barras (líneas verticales alrededor de los labios)
  • Elevación de la punta nasal
  • Elevación de las comisuras labiales
  • Suavización del mentón "en piel de naranja"
  • Definición del contorno mandibular
  • Tratamiento de bandas platismales del cuello

Otros Usos Terapéuticos

Además de sus aplicaciones estéticas, la toxina botulínica también se utiliza para tratar diversas condiciones médicas:

  • Hiperhidrosis (sudoración excesiva) en axilas, manos y pies
  • Migrañas crónicas
  • Bruxismo (rechinar de dientes)
  • Sonrisa gingival (exposición excesiva de encías al sonreír)

El Procedimiento

El tratamiento con toxina botulínica es rápido y prácticamente indoloro, pudiendo realizarse en una consulta regular:

  1. Evaluación facial: La Dra. Marta Leguizamón analiza tu rostro en reposo y en movimiento para determinar los puntos de inyección óptimos.
  2. Preparación: Se limpia la zona a tratar y, si lo deseas, se puede aplicar una crema anestésica tópica.
  3. Inyección: Utilizando agujas muy finas, se inyectan pequeñas cantidades de toxina botulínica en los músculos específicos.
  4. El procedimiento completo dura aproximadamente 15-20 minutos, dependiendo del número de áreas a tratar.

Resultados y Duración

  • Los resultados comienzan a notarse entre 3 y 7 días después del tratamiento, con el efecto máximo visible a los 14 días.
  • La duración del efecto varía según el metabolismo individual, pero generalmente se mantiene entre 3 y 6 meses.
  • Para mantener los resultados, se recomienda repetir el tratamiento cada 4-6 meses.
  • Con tratamientos regulares, los músculos se "reeducan" y pueden requerirse menos sesiones o dosis más bajas con el tiempo.

Beneficios

  • Reducción visible de arrugas de expresión
  • Prevención de la formación de nuevas líneas
  • Aspecto más descansado y juvenil
  • Procedimiento rápido, sin tiempo de recuperación
  • Resultados naturales cuando es aplicado por profesionales experimentados
  • Tratamiento seguro con décadas de uso clínico
  • Posibilidad de combinarlo con otros tratamientos estéticos

Cuidados Post-Tratamiento

Después del tratamiento con toxina botulínica, se recomienda:

  • No masajear ni presionar la zona tratada durante 4 horas
  • Mantener la cabeza erguida durante 4 horas
  • Evitar actividad física intensa durante 24 horas
  • No exponerse a fuentes de calor intenso (sauna, baños de vapor) durante 24 horas
  • Evitar el consumo de alcohol durante 24 horas
  • Realizar expresiones faciales durante las primeras horas para ayudar a la absorción

Candidatos Ideales

Los mejores candidatos para el tratamiento con toxina botulínica son personas que:

  • Presentan arrugas de expresión en frente, entrecejo o contorno de ojos
  • Desean prevenir la formación de arrugas
  • Buscan un procedimiento sin tiempo de recuperación
  • Tienen expectativas realistas sobre los resultados
  • No están embarazadas ni en periodo de lactancia
  • No padecen enfermedades neuromusculares como miastenia gravis

En la consulta con la Dra. Marta Leguizamón, se realizará una evaluación personalizada para determinar si la toxina botulínica es el tratamiento adecuado para ti y diseñar un plan que se adapte a tus necesidades específicas, siempre buscando resultados naturales que realcen tu expresión sin alterarla.